Cuando miro a la mar veo tus ojos y a mí misma enjaulada en tu pupila azul. “Qué es poesía, ¿me preguntas?” Aunque tú eres un poema de Julio Cortázar, desconocido, complejo, sincero, dual, bello y áspero.
Deseo acariciarte como las olas acarician los guijarros, violentamente, y los erosionan en cantos redondos y suaves. El tiempo inexorable ha destruido todo a nuestro alrededor, y estamos solos, en un colchón, desnudos. La mente blanca descansa sobre las sábanas blancas. Y creo que te quiero.
“Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos”
Pero una ola gigante se aproxima, quedan pocos segundos y tengo que decidir: entre tu vida y mi muerte. Corro y ya estoy a salvo. Ya no hay tsunami, ni culpabilidad por los caídos, ni sentimientos.
Soy el guijarro que la mar mece de un lado a otro.
Escrito en Havelok, el 19 de mayo de 2014.